Así, destacan que el sector cinegético y el medio rural más desfavorecido al que representan ha tenido el silencio por respuesta en sus requerimientos a distintos partidos políticos.
El presidente de la ONC, Juan Antonio Sarasketa, ha impulsado la concentración en la que participarán representantes de todas las áreas y actividades que se encuadran dentro del sector cinegético.
Del mismo modo, denuncia que los representantes de la sociedad, diputados y senadores, "parecen haber olvidado el fuerte impacto de la actividad cinegética en la economía, en la conservación de los hábitats, en las zonas más pobres y en la pervivencia de los ciudadanos del mundo rural".
Así, pone de ejemplo la petición de reuniones a varios partidos antes de las elecciones generales para conocer sus prioridades y propuestas de cada partido, una solicitud que "en casi la totalidad de los casos ni siquiera fue respondida".
Por ello, la ONC tiene la sensación que la clase política actual muestra un "desapego" hacia los intereses del campo, la verdadera conservación, la caza y, por encima de todo, a los millones de electores ligados directa o indirectamente a las actividades cinegéticas.
A su juicio el mutismo y el aparente desprecio al sector "no debe ser la tónica común" de la mayor parte del elenco político como ha sido en los últimos tiempos. De este modo, destaca que en Portugal todo el espectro político declaró hace meses la montería ibérica como un bien de especial protección, dinamizador del medio rural, al tiempo que en Alemania crece el número de cazadores, o en Italia o Francia, donde se protegen las modalidades tradicionales de caza.
Por ello, reclaman que no se antepongan los intereses personales e institucionales de unas pocas organizaciones autodenominadas "ecologistas" ni dar "solo" voz y voto a quienes quieren cercenar los derechos de los cazadores y luchan activamente contra la caza en cualquier modalidad, "desde poltronas que, por su escasa representatividad, no se han ganado".